La halitosis consiste en tener un mal aliento bucal, la cual hasta puede causas trastornos en nuestras relaciones sociales. Es un problema muy extendido, ya que hay estudios que determinan que el 40% de la población sufre de algún grado de halitosis. Las causas son diversas, desde una higiene bucal deficiente, pasando por enfermedades bucales o manifestaciones de otras patologías.
El principal origen es la placa bacteriana oral, la cual es una acumulación de bacterias y restos de comida en nuestra boca que se originan continuamente y son las encargadas de producir desde caries hasta gingivitis. La acumulación de esta placa en la lengua es la principal causa, aunque otros factores como el tabaco, la caries y enfermedades periodontales. La halitosis también puede venir de más adentro, sin ser su origen la boca. En estos casos se produce por trastornos del aparato digestivo, respiratorio y por enfermedades del hígado y del riñón, aunque estos casos son mucho más reducidos que la halitosis producida por problemas bucales.
Para eliminar el mal aliento existe una serie de colutorios, sprays y chicles que contienen unos ingredientes especiales que reducen el mal olor y combaten la aparición de la placa bacteriana. En muchos casos el mal aliento se puede eliminar con una higiene bucal adecuada con estos productos, entre los que encontramos:
Colutorios: se trata de productos de posterior utilización a la pasta o gel dentífrico que proporcionan un a protección contra el mal olor hasta 12 horas.
Pastas y geles dentífricos: Utilizar un buen producto de limpieza bucal junto con un buen cepillado es imprescindible para combatir la placa y así reducir la halitosis.
Cepillos interproximales: antes de cepillarse los dientes, se recomienda limpiarse los espacios interdentales con cepillos interproximales o seda dental, ya que es aquí donde más se acumula la placa ya que un cepillo de dientes muchas veces no puede llegar a estos recovecos.
Sprays y chicles: son productos de bolsillo de actuación rápida que reducen el mal olor a la vez que proporcionan frescor bucal. Estos chicles no son convencionales, sino que incluyen en su fórmula elementos que reducen y eliminan el mal olor, mientras que los chicles normales tan solo lo cubren.
En el caso de que el mal olor se deba tanto como a caries como a cálculos de placa entre los dientes y gingivitis es recomendable acudir al dentista, ya que en estos casos el mal olor es una consecuencia de un problema mayor que es necesario resolverlo cuanto antes para no tener problemas mayores.
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